Telmisartán: Los síntomas más comunes de una sobredosis de Terlmisartán fueron hipotensión y taquicardia: también se han notificado bradicardia, mareo, aumento de la creatinina sérica y fallo renal agudo. El telmisartán no se elimina por hemodialisis, el paciente debe ser estrechamente monitorizado y el tratamiento debe ser sintomático y de soporte, el carbón activado puede ser útil en el tratamiento de la sobredodificación, se debe monitorizarse con frecuencia la creatininaa y los electrolitos en suero. Hicroclotiazida: Los síntomas y signos más comunes de la sobredosificación son debido a la pérdida de electrolicos (hipopotasemia, hiponatremina) y a la deshidratación resultante de la diuresis excesiva. Si el paciente ha recibido digitálicos, la hipopotasemia puede acentuar las arrtimias cardiacas. Se recomienda la evacuación inmediata del estómago, seguida de tratamientos de soporte; el tratamiento sintomático y monitoreo de las concetraciones séricas de electrolitos y de la función renal. Amlodipino: Los datos disponibles sugieren que una sobredosis grave puede provocar excesiva vasodilatación periférica y posiblemente taquicardia refleja. Se ha informado de hipotensión sistémica marcada y, problablemente, prolongada que puede llegar incluso al shock con resultado de muerte. La administración de medicamentos vasoconstructores puede ser útil para restablecer el tono vascular y la presión arterial. La administración intravenosa de gluconato de calcio puede ser de utilidad para revertir los efectos del bloqueo de los canales de calcio. El lavo del estomágo puede ser útil en algunos casos la administración de carbón activado ha demostrado reducir de forma significativa la absorción del amlodipino.